Este reconocimiento confirma el trabajo constante de la empresa en economía circular y gestión ambiental.
La certificación mide y verifica las emisiones de gases de efecto invernadero. Tuero Medioambientecalcula su huella de carbono y trabaja para reducirla año tras año. No es solo un sello. Es el resultado de acciones reales.
La empresa contribuye a la reducción de emisiones mediante la generación de energía verde. Minimiza residuos, contaminación y presión sobre recursos naturales. Fomenta la eficiencia en el ciclo de vida de los productos y promueve la regeneración de sistemas naturales.
TUERO valoriza lo que otros desechan. Convierte residuos en recursos valiosos. Cierra el círculo de la sostenibilidad y crea nuevas oportunidades.
Esta renovación representa un compromiso continuo. La economía circular no es una tendencia para la empresa. Es su forma de trabajar cada día.
¿Por qué importa esto? Porque cada acción cuenta. Porque las empresas tienen responsabilidad sobre su impacto ambiental. Y porque el futuro necesita modelos que funcionen de verdad.
La certificación AENOR no es el punto final. Es una confirmación de que el camino es el correcto. TUERO seguirá midiendo, mejorando y actuando.
El compromiso con el medio ambiente requiere transparencia y rigor. Por eso la empresa apuesta por certificaciones externas que validan su trabajo. Por eso comparte sus avances.
La economía circular valoriza lo no deseado en recursos valiosos. Construye un futuro más sostenible y equitativo. Y TUERO forma parte de ese cambio.
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